Critical Analysis:
the impact of TikTok restrictions in the USA and the rest of the world

ras las elecciones más votadas de la historia de Portugal, y todavía con la incertidumbre de que algún partido con más votos pueda formar gobierno, nuestra atención se centra en lo que ocurre al otro lado del Atlántico, donde el Senado de los Estados Unidos de América se prepara para una decisión sin precedentes: bloquear el funcionamiento de una aplicación móvil en territorio norteamericano, más concretamente, TikTok. En los últimos años, TikTok se ha convertido en una de las plataformas de redes sociales más populares en todo el mundo, ofreciendo una forma única y atractiva para que los usuarios se expresen, compartan contenido y se conecten con otros usuarios. Desde esta explosión de popularidad, TikTok se ha enfrentado a un escrutinio cada vez mayor por parte de los gobiernos, especialmente en los Estados Unidos de América, donde se han planteado preocupaciones sobre la seguridad de los datos de los usuarios y los posibles vínculos entre la empresa matriz de TikTok, ByteDance, y el gobierno chino, lo que ha llevado a algunos funcionarios estadounidenses a afirmar que la aplicación representa una amenaza para la seguridad nacional. En respuesta a estas preocupaciones, ha habido intentos de prohibir o restringir severamente TikTok en Estados Unidos, porque hacerlo sería necesario para proteger los datos de los usuarios y salvaguardar la seguridad nacional. Sin embargo, muchos han cuestionado si estas preocupaciones están bien fundadas o se utilizan como una excusa conveniente para promover intereses políticos y económicos, dado el valor astronómico que representa (financiera y tecnológicamente) el algoritmo desarrollado por ByteDance. Históricamente, los gobiernos han utilizado la justificación de la “seguridad nacional” para restringir los derechos y las libertades de los ciudadanos, a menudo sin una base sólida en términos de amenazas reales a la seguridad. Esto plantea serias preguntas sobre cómo los gobiernos pueden utilizar esta justificación para promover sus agendas, a menudo a expensas de los derechos individuales y la libertad de expresión. En el caso de TikTok, muchos sostienen que el verdadero motivo detrás de los intentos de prohibición en Estados Unidos es proteger a las empresas competidoras y promover intereses económicos, más que proteger la seguridad de los datos de los usuarios. Al fin y al cabo, la principal exigencia que plantean las autoridades estadounidenses para que TikTok pueda seguir operando en el país es que se venda a una empresa o conglomerado de empresas más “amigas de Estados Unidos”. Esto sugiere que la retórica en torno a la seguridad nacional puede utilizarse de manera oportunista para justificar la discriminación contra empresas extranjeras y regímenes políticos diferentes. La prohibición o restricción de TikTok en Estados Unidos tendría importantes consecuencias para los derechos y libertades de los ciudadanos estadounidenses, especialmente en lo que respecta a la libertad de expresión y el acceso a la información. Además, al ser Estados Unidos un importante influenciador, otros países podrían seguir pronto su ejemplo, pisoteando los derechos y libertades de los ciudadanos de todo el mundo. TikTok se ha convertido en una plataforma vital para que millones de personas en todo el mundo se expresen, compartan sus historias, se conecten con otras comunidades y ganen dinero con ello. Restringir el acceso a esta plataforma limitaría, en esencia, la capacidad de las personas para expresarse libremente en línea. Además, una prohibición de TikTok también tendría un impacto económico significativo, que afectaría no solo a la empresa detrás de la plataforma, sino también a los creadores de contenido, anunciantes y otras partes interesadas que dependen de ella para generar ingresos y conectarse con su audiencia. En definitiva, la controversia en torno a TikTok pone de relieve los complejos desafíos que afronta la era digital, en la que las preocupaciones sobre la seguridad de los datos de los usuarios suelen entrar en conflicto con los derechos y las libertades individuales. Si bien la protección de la seguridad nacional es importante, es fundamental garantizar que las restricciones impuestas en nombre de ella no se utilicen como pretexto para promover agendas políticas o económicas y que los derechos y las libertades de los ciudadanos se protejan de forma justa y equitativa.